Se puede determinar que la gestión de proyectos es un aspecto donde las empresas organizan recursos y personas para llevar a cabo un objetivo específico de principio a fin, mediante herramientas de productividad flexibles que permiten junto con los hábitos de los clientes, adaptarse a los cambios constantes que presenta el mercado para obtener mayor competitividad y lograr sus objetivos de una manera rápida y organizada. Metodologías ágiles de hecho, se constituye como uno de los métodos de gestión de proyectos más utilizados por las empresas, sin embargo existen diferentes tecnologías y tendencias que ayudan igualmente a las organizaciones a generar el impacto deseado, entre las que se pueden encontrar:
Project Managers, Inteligencia emocional y habilidades blandas
En un entorno donde las relaciones interpersonales laborales son cruciales para la gestión de proyectos, cada vez más crece la demanda de talentos con habilidades blandas como colaboración, liderazgo y comunicación, con el objetivo que puedan encajar en la filosofía y cultura de cada empresa.
Teniendo en cuenta el trabajo que conlleva un proyecto y las dimensiones y complejidad que pueda tener, la figura de Project Manager o gestor y líder de proyectos, toma una alta relevancia en la mayoría de metodologías y tendencias, ya que como responsable de coordinar el trabajo y las responsabilidades de cada miembro del equipo para llevar a cabo un proyecto, debe tener la inteligencia emocional y la capacidad suficiente para entender y comprender no solo las necesidades del cliente y las tareas del proyecto, sino también resolver todos los inconvenientes que se puedan presentar en el camino para optimizar la eficiencia y productividad del equipo de trabajo.
Productos a cambio de proyectos
En la mayoría de casos donde se utilizan las diferentes tendencias y herramientas de gestión de proyectos, el enfoque se basa en realizar una secuencia de tareas que deben completarse en unos presupuestos y plazos acordados. Para este caso, el enfoque se basa en priorizar la entrega de productos, permitiendo centrarse en las necesidades de los clientes, teniendo flexibilidad en diferentes aspectos como el presupuesto.
Colaboración y trabajo remoto
Con velocidades de internet cada vez mayores, el trabajo remoto ahora más que nunca, se ha convertido en un recurso vital estándar para muchas compañías y gracias a las tecnologías actuales es más fácil trabajar y colaborar conjuntamente.
Aprovechando las aplicaciones colaborativas y soluciones en la nube que actualmente están disponibles mediante funciones de voz, chat y video, la medición de metas, planificación de proyectos y la comunicación con los demás miembros del equipo, se hace de manera simple y rápida, todo dependiendo de la perfecta coordinación que se realice entre los miembros del grupo de trabajo.
Big Data
Actualmente y como herramienta casi indispensable para los próximos años, la utilización de Big Data, se convierte en una pieza fundamental en la gestión de proyectos, brindando un insumo fundamental para la realización de estimaciones de costos, basado en proyecciones y análisis de datos reales que representan un gran potencial para la implementación de desarrollo de productos y estrategias de ventas.
Inteligencia artificial
Partiendo desde el Big Data, la automatización del análisis de datos se da mediante la aplicación de algoritmos que permiten mediante la inteligencia artificial, ayudar a organizar y optimizar el flujo de trabajo garantizando la eficiencia necesaria para el desarrollo de los proyectos.
Design Thinking
Es una manera de aplicar conjuntamente la creatividad para la solución de problemas complejos, mediante respuestas innovadoras que ayuden a mejorar los tiempos y aumentar los resultados. La suma de todas las competencias y conocimientos del equipo de trabajo serán fundamentales para llevar a cabo el proyecto de una manera exitosa.